Inicié el 2020 con un especial y muy fuerte entusiasmo por una filosofía de trabajo que venía escuchando hace un tiempo pero que poco se hablaba en mi sector. Esta filosofía de trabajo es una nueva forma de pensar los procesos de construcción y de las organizaciones con el más noble propósito de mejorar la eficacia en la construcción. Me refiero a mejorar el flujo de trabajo con el objeto de mejorar calidad, reducir costos y cumplir con los plazos. En verdad de nueva no tienen nada ya que surge de una metodología que implementó Toyota después de la Segunda Guerra Mundial para optimizar su sistema de producción basándose principalmente en la eliminación de desperdicios, enfocándose en las personas y en lo que aporta valor tanto al cliente interno como al externo. Las técnicas del Lean Construction, como el Last Planner® System, unidos a metodologías como el BIM y el IPD forman parte de esta nueva era tecnológica y facilitan la planificación de las obras de construcción, potenciando el trabajo colaborativo entre todos los agentes intervinientes y mejorando los procedimientos.

En estos pocos meses participé de 8 Masterclass sobre Lean Construction impartidas por profesionales del sector de la construcción española y chilena luego de las cuales quedé totalmente convencido que su implementación es real, es factible y está sucediendo en estos momentos. Ahora queda un periodo de mejora continua donde es fundamental aplicar las técnicas para equivocarse, aprender, tomar nota y volver a implementar en un ciclo de mejora continua. 

Desde mi más humilde posición quiero ir compartiendo informaciones y definiciones sobre esta filosofía con el objeto de lograr que te emociones como me emocioné yo. 

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